¡Tener un bebé que se niega a tomar el biberón cuando está con un cuidador puede ser muy estresante! No es inusual que los padres hayan probado toneladas de biberones diferentes con la esperanza de encontrar el que finalmente el bebé tomará. Esto puede ser absolutamente lo que su bebé necesita, pero aquí hay algunas otras cosas que puede probar antes de salir a comprar más biberones nuevos.
1. Deje que su bebé sienta y chupe la tetina del biberón (con la tetina unida al collar del biberón) sin el biberón conectado para que se acostumbre a sentirlo en la boca. Si acepta, puedes poner una gota de leche materna en el pezón o sumergir el pezón en tu leche para ver si lo chupa. Nunca fuerces el pezón en la boca del bebé, apóyalo sobre su labio superior para que abra la boca y lo acepte primero. Si se niega o se enoja, deténgase e inténtelo en otro momento.
2. Intente sostener a su bebé en una posición diferente mientras lo alimenta con biberón. A veces, estar en posición de amamantar simplemente desencadena sus instintos de lactancia. Intente mirarlos hacia afuera o acostarse de lado mirando hacia la habitación en lugar de usted.
3. Intente moverse mientras alimenta a su bebé. Camine por la habitación o bátelos suavemente. Si hace buen tiempo, intente alimentarlos afuera para cambiar de escenario.
4. Pruebe diferentes temperaturas de leche. Algunos bebés pueden preferir leche tibia o a temperatura ambiente, mientras que otros pueden tomarla fría.
5. Pruebe cuando el bebé acaba de despertarse y todavía tiene sueño. Algunos bebés pueden ser más propensos a aceptar el biberón durante la noche, cuando está oscuro y tranquilo y están somnolientos y recién se despiertan para comer.
6. Intente envolver el biberón en una camisa o tela que haya usado mamá, para que huela a ella. El olor de mamá puede ser calmante y eso, junto con el olor a leche, puede desencadenar señales de alimentación.
7. Intente ofrecerle el biberón cuando el bebé no tenga mucha hambre. ¿Cómo te sentirías al probar una nueva habilidad cuando estuvieras muriendo de hambre? Probablemente tendrá muy poca paciencia y se sentirá frustrado. Tampoco le ofrezcas el biberón a un bebé por primera vez cuando esté hambriento. En su lugar, pruébelo tal vez como un “refrigerio” entre sus horas habituales de alimentación o un poco antes de lo que normalmente tendría hambre.
8. Huele o prueba bien tu leche para asegurarte de que no tenga niveles altos de lipasa. Si tu leche tiene un sabor y olor metálico o jabonoso, este podría ser el culpable. Si tiene una alta actividad de lipasa, significa que la enzima lipasa está descomponiendo la grasa de la leche rápidamente, lo que provoca el mal olor y sabor. Sigue siendo leche en perfecto estado y completamente segura para que la beba su bebé. Algunos bebés lo beberán encantados, mientras que otros lo rechazarán.
9. ¡La paciencia, la perseverancia y la coherencia son a veces la clave! Para algunos bebés esto es un proceso y la clave es seguir intentándolo todos los días. Es posible que les tome algo de tiempo acostumbrarse y es posible que tengas que probar algunas cosas diferentes hasta que descubras qué les gusta.
Witten de Nicole Schwartz
IBCLC